Consejos del dentista para prevenir nuestros dientes en Navidad
Se acercan las entrañables fechas de Navidad. Es un momento de reunión, de encuentros con personas que hace tiempo que no ves e incluso, a veces sirven para la reconciliación o terminan en separación.
Lo que es seguro es que siempre va acompañado de numerosos y grandes banquetes con abundantes comidas y bebidas.
Por lo tanto la boca y los dientes van a hacer un trabajo extra en estos días.
En este artículo vamos a hablar de las precauciones y las consecuencias de la navidad e intentar que enero sea un mes de paz dental y ausente de visitas a la clínica dental.
Primero hablaremos de los problemas que pueden provocar los alimentos y posteriormente daremos algunos consejos.
Comidas, bebidas y demás
Un clásico de las comidas navideñas es el marisco. Es habitual ver a algunos compañeros de mesa mordisquear caparazones de cangrejo, patas de cigala, etc. Es evidente que esto no es procedimiento adecuado puede provocar fracturas dentales incluso en dientes sanos.
La carne es un alimento aparentemente poco lesivo incluso inofensivo, pero al ser una estructura fibrosa, y lo digo en general, ya que hay carnes que son más suaves, nos puede producir fracturas dentales por la presión de la fibra al masticar, muy habitual esta fractura en premolares superiores.
Del mismo modo han de ser cuidadosos los que les encanta roer los huesos para evitar alguna rotura generalmente incisivos.
Lo mismo pasa con embutidos como jamón, lomo, chorizo, por la misma razón relacionada con el tejido fibroso.
La carne y el embutido tienen un añadido más que es el empaquetamiento del mismo entre los dientes, lo cual puede provocar una intensa gingivitis, incluso una infección, si no se ponen medios.
Lógicamente la presencia de alimentos dulces aumenta significativamente en nuestra dieta durante estos días.
Los alimentos dulces, con alto nivel de sacarosa son una importante causa de caries, unido a otros factores, pero además los productos como turrón, gominolas o que sean muy pegajosos nos pueden hacer caer alguna corona dental o algún “empaste”.
Cuidado también con los frutos secos que pueden generar presión en la masticación y por supuesto ni que decir tiene, si tienen cáscara dura, no se han de partir con los dientes.
Respecto a las bebidas, ya sean alcohòlicas o no, tienen un papel importante en la salud bucodental.
Las bebidas azucaradas tomadas en exceso pueden provocar riesgo de caries . Las bebidas alcohólicas de la misma manera, sin exceso, no tienen que generar ningún problema.
Como nos ceñimos exclusivamente a la etapa navideña y por lo tanto de manera circunstancial, no hablamos de los problemas que puede conllevar el hábito de tomar azúcares o alcohol o ambos de manera crónica, ya no sólo en la boca sino incluso más allá de problemas bucales.
Consejos para un buen Enero dental
No usar los dientes como tenazas, los dientes cortan, desgarran y mastican.
Pero con cierto sentido común.
Si hay algún diente o premolar o muela debilitado, por ejemplo, gran “ empaste”, endodoncia ( nervio muerto), corona o algo similar, no forzarlo, ser conscientes de esa fragilidad.
Del mismo que con una prótesis de rodilla no correrás un maratón no fuerces los dientes que estén debilitados.
En general una higiene más exhaustiva, limpiando dientes después de cada comida durante un tiempo de tres minutos, también entre los dientes con deda dental o cepillos interdentales, como hemos hablado antes de las fibras de carne y embutidos.
Y por último independientemente de la debilidad dental causada por tratamientos dentales, pensad en la debilidad por el paso del tiempo aún en dientes sanos.
Esperamos que tengáis unas felices fiestas y disfrutad con una gran sonrisa.